Nadadores olímpicos canarios

Acaban de terminar los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, y a la espera de los Juegos Paralímpicos (en los que sí habrá nadadores de las islas). nos gustaría hacer un repaso por nuestra historia olímpica en lo que a natación clásica se refiere. Nos da la sensación de que las nuevas generaciones desconocen la gran contribución que nuestros deportistas han hecho en la historia olímpica de nuestro deporte, no solo en las islas, sino en todo el territorio nacional. Hubo un tiempo en el que el groso de la selección española de natación estaba formado por nadadores canarios y es importante conocer de dónde venimos para saber hacia dónde vamos. Valga este artículo como un homenaje a aquellos nadadores que con su sacrificio y esfuerzo lograron su sueño olímpico y pasearon el nombre de las islas en once Juegos Olímpicos diferentes, empezando en Londres en el año 1948 y terminando de momento en Pekín 2008. Las perspectivas son buenas para Tokio 2020, con dos nadadores dentro del plan ESP-2020 y varios despuntando a nivel nacional con resultados relevantes. Confiamos en que en este nuevo ciclo olímpico que ahora comienza, sean muchos más los que logren estar en el equipo nacional. Nosotros siempre somos optimistas, porque creemos que hay mucha calidad en nuestros nadadores. No en vano son la herencia de grandes deportistas como los que vamos a mencionar en este artículo. Pasamos a enumerar los Juegos Olimpicos en los que hemos tenido nadadores canarios:

Londres 1948

Los nuestros se estrenaban en las Olimpiadas de Londres en el año 1948, los primeros Juegos tras la II Guerra Mundial, tras la cancelación de los de 1940 y 1944 por motivos sobradamente conocidos. Hasta la capital inglesa se desplazaban tres nadadores canarios: Manuel Guerra (Gran Canaria), Francisco Calamita (Tenerife) y el gran Jesús Domínguez, al que no podemos asignarle una isla de procedencia, ya que si bien es tinerfeño de nacimiento y crianza, desarrolló su vida deportiva en Gran Canaria, donde se forjó como el gran nadador que fue. Pinchando en el nombre de los nadadores pueden comprobar sus registros y sus clasificaciones (datos extraídos de la web www.canariasport.com). Citar que Guerra y Domínguez llegaban a las semifinales en la prueba del 4x200 metros libres. Queremos además destacar que en los siguientes Juegos Olímpicos, los de Helsinki 1952, se privó a Jesús Domínguez y a Antonio Quevedo de su participación olímpica, a pesar de haber realizado las mínimas exigidas para ello. Algo similar ocurría con Roberto Alberiche, Jesús Benjuméa, Pastora Martín y María Adela Martínez, como bien cuenta la interesante publicación de la web www.revistacanarii.com, que en su apartado dedicado a las olimpiadas dice lo siguiente:



Roma 1960


Los Juegos Olimpicos de Roma hicieron justicia con nuestra natación, siendo la edición en la que más nadadores de las islas hemos tenido. Si la selección nacional estaba compuesta por diez nadadores, seis de ellos eran canarios. Competían Julio Cabrera (Gran Canaria), José María Cossío (Gran Canaria), Emilio Díaz (Gran Canaria), Heriberto de la Fe (Gran Canaria), Rita Pulido (Gran Canaria) y José Vicente León (Tenerife). Se quedaba a las puertas de estos Juegos Eduardo Ley, que tenía la mala suerte de coexistir deportivamente con José Vicente León y Heriberto de la Fé, que sí tenían el privilegio de acudir a los Juegos, siendo Ley tan merecedor como los dos primeros.

Gran gesta la de Rita Pulido, que se convertía en la primera mujer canaria en unos Juegos Olímpicos con tan solo quince años de edad, abriendo el camino para las féminas en la competición más importante del mundo.


Tokio 1964


Japón era el siguiente destino olímpico, y tres nadadores canarios volvían a ganarse su derecho a participar en unos Juegos. Repetía Rita Pulido (Gran Canaria), volviendo a romper esquemas, ya que se convertía en la primera deportista canaria que disputaba dos Juegos Olímpicos de manera consecutiva, aunque poco después y con tan solo diecinueve años, ponía termino a su exitosa carrera deportiva, Le acompañaban Jesús Cabrera (Gran Canaria) y Nazario Padrón (Gran Canaria), espaldista y bracista respectivamente, que marcaron una época en nuestra natación, siendo el modelo a seguir de generaciones venideras. Jesús daba continuidad a la brillante trayectoria de su hermano Julio, olímpico en Roma 1960. Como ejemplo, decir que el récord nacional de los 100 espalda en piscina larga, perteneció a los hermanos Cabrera desde 1958 hasta 1965, llevándolo desde 1.10,5 Julio hasta 1.04,5, y desde este crono hasta 1.01,9 Jesús. En esta ocasión no había nadadores tinerfeños entre los seleccionados, la primera vez que ocurría en nuestra historia olímpica.


México 1968


Cuatro años más tarde era México el país encargado de celebrar los Juegos Olímpicos de verano. Cuatro nadadores canarios eran seleccionados para nadar en la alberca "Francisco Márquez" en la que se disputaron las pruebas de natación. Repetía experiencia olímpica Jesús Cabrera (Gran Canaria), acompañado de un joven Arturo Lang Lenton (Gran Canaria), de Juan Fermín Martínez (Gran Canaria) y Diego Martell (Tenerife). En estos Juegos tuvimos al primer finalista olímpico de nuestra natación, ya que el equipo 4x100 metros estilos masculino, entraba en la final con la posta de mariposa de Arturo Lang Lengton. Era octavo en la final, viviendo una de las mejores experiencias deportivas de su historia.


Munich 1972


En Alemania solo un nadador canario conseguía su clasificación para los Juegos, confirmando el declive de nuestra natación, tras décadas de bonanza. Los canarios seguían estando entre los mejores de España, pero no de manera apabullante, lo que se tradujo en una menor presencia en las selecciones nacionales. Aún así, Arturo Lang Lenton (Gran Canaria) continuaba por la senda del éxito, que le llevaría hasta el año 1974, cuando se retiraba como campeón de España y recordista nacional, a pesar de tener solo veinticinco años de edad. Repetía Arturo presencia olímpica, en unos Juegos marcados por las gestas deportivas de Mark Spitz, algo que el grancanario vivió en directo, y también por el insólito atentado terrorista en la Villa Olímpica, que el propio ex nadador relataba hace cuatro años en una entrevista realizada por  la web www.tintamarilla.es.


Montreal 1976


Canadá albergaba los Juegos Olímpicos de la XXI olimpiada, y en esta ocasión volvíamos a tener a dos nadadores entre los seleccionados para competir en Montreal. Se trataba de Jesús Fuentes (Gran Canaria) y de  Miguel Lang Lenton (Gran Canaria), que recogía el testigo de su hermano Arturo, recientemente retirado, y no lo podía hacer de mejor manera. Al igual que los hermanos Cabrera a principios de la década de los 60, los Lang Lenton hacían sonar su apellido en los 70, y es que desde el año 1967 hasta 1976, recaía en ellos el récord nacional de los 200 metros mariposa. Lo batía Arturo con 2.16,0 en el año 67 (llevándolo hasta 2.09,0 en el 74) y Miguel lo rebajaba hasta 2.08,00 en el año 1976, un mes después de estos Juegos en los que también superaba el récord de España con 2.08,51, una marca que todavía tendría mucho valor en el concierto regional actual.

Moscú 1980


Los Juegos de Moscú supusieron para España un punto de inflexión, ya que el metropolista (que no canario) David López Zubero, conseguía la primera medalla olímpica de la natación española, bronce en los 100 metros mariposa. Este éxito, que no es atribuible a la natación canaria en absoluto (sí a la natación americana), fue el antecedente de la medalla de Sergi López en el año 88 y del título de su hermano Martín López Zubero en el 92. Resulta curioso, y nos detenemos en esto aunque no pertenezca a la natación canaria, que nadadores nacidos de los años 90 en adelante desconozcan a estas figuras no tan lejanas de la natación española. En lo que a la natación canaria se refiere, tan solo un nadador, el chicharrero Gustavo Torrijos (Tenerife), que a pesar de sus escasos diecisiete años, era seleccionado gracias a sus brillantes registros. Curiosamente, en el máximo esplendor de su carrera, en el año 1984, no lograba hacer las marcas mínimas exigidas en la competición que la federación española consideraba como válida. A pesar de haber rebajado las marcas necesarias en otras competiciones, Torrijos no estaba en su mejor momento en los "trials" españoles, viniendo desde Estados Unidos y con su preparación encaminada a unos Juegos en los que nunca pudo participar. Una verdadera pena, ya que a partir de ese año se forjó su pronta retirada (aunque compitió unos años más muy lejos de su nivel). También aprovechamos para citar la figura de Francisco Benítez (Kossi), otro tinerfeño que brilló a principios de los 80, con récords nacionales y presencias internacionales , pero que no pudo ver premiada su gran carrera deportiva con unas olimpiadas.


Barcelona 1992


Con las ausencias citadas en los Ángeles 84 y sin nadadores canarios en Seúl 88 (sí la hubo en saltos de trampolín, con el incombustible Rafael Álvarez, aunque una vez allí no pudiera saltar por una inoportuna lesión en los entrenamientos), llegamos hasta los Juegos de Barcelona 1992. Allí estaba la gran Natalia Pulido (Gran Canaria), siguiendo los pasos de su madre, Rita Pulido, que fue la primera olímpica canaria, como ya comentamos en los Juegos de Roma y Tokio. Gran carrera deportiva la de esta joven, fruto del buen hacer de Quique Martínez (al igual que su madre), y que siempre competía de manera magistral, conservando un preciado récord nacional en los 200 libres desde el año 1992 al 95 (2.04,10), y que llegó a ser campeona nacional en un mismo campeonato en los 100, 200, 400 y 800 metros libres.  En Barcelona era 24ª en los 200 metros libres (2.04,39) y 26ª en el hectómetro, con 58,54. A un paso de estar en esta cita se quedaba un jovencísimo Frederik Hviid, que comenzando su experiencia americana (emigró ese mismo año a Maryland) hacía el tope olímpico fuera de plazo en los 400 metros estilos, con unos tremendos 4.24,75 cuando todavía no había cumplido los dieciocho años. Sus mejores momentos deportivos estaban aun por llegar.


Atlanta 1996


Estados Unidos, en concreto la ciudad de Atlanta, tomaba el testigo cedido por la Ciudad Condal como organizadora de los Juegos Olímpicos de la XXVI olimpiada. Solo un nadador de las islas, Frederik Hviid (Gran Canaria), que tras el chasco sufrido cuatro años antes, estaba ya situado entre los mejores nadadores del mundo, tras sus finales europeas en los años previos, aunque con un cierto estancamiento en sus registros en los estilos y empezando a destaparse como un fondista de mucha calidad. Nadaba Frederik los 400 estilos y los 1500 en su primera cita olímpica (no sería la última), siendo noveno en los 400 metros estilos con 4.22,47, imponiéndose en la final B (antes existían finales para los ocho primeros y los ocho siguientes). En los 1500 realizaba 15.42,40 (21º), alejado de sus posibilidades reales y de sus mejores 15.34,75. A continuación les mostramos un vídeo de la final B de los estilos, en la que se imponía:





Sydney 2000

Los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 volvían a tener a Frederik Hviid (Gran Canaria) como protagonista canario en la natación clásica (acompañado de Rafael Álvarez en saltos y Paola Tirados en la natación sincronizada). Hviid llegaba a los Juegos como campeón de Europa y recordista nacional en los 400 estilos con 4.17,18 el año anterior en Estambul, además de haber sido subcampeón europeo en Sevilla tres años antes, cubriendo un ciclo olímpico de éxitos y mucha progresión. En los 400 estilos no tenía una buena actuación, quedando fuera de la final con 4.21,63 (15º), y con la mala suerte de quedarse a un paso de la final de 1500, a pesar de batir su propio récord de España con un tiempo de 15.14,37 (12º). Estos serían las últimas olimpiadas del mejor canario de todos los tiempos, que cubría así una carrera deportiva de ensueño, con dos participaciones olímpicas, finales europeas y mundiales e infinidad de récords nacionales en todas las categorías.


Pekín 2008

Atenas 2004 pasaba sin pena ni gloria para nuestros intereses, teniendo eso sí a Paola Tirados e Ione Serrano en sincro y a Leyre Eizaguirre en saltos. Pero no era hasta Pekín 2008 cuando volvíamos a ver a una nadadora canaria batirse entre corcheras con la flor y nata de la natación mundial. En los mismos Juegos en los que Paola Tirados y Thais Henríquez subían al podio a por una inolvidable medalla de plata, Escarlata Bernard (Gran Canaria), bicampeona europea Junior, y cuarta de Europa absoluta en el año 2006, era la encargada de dejar alto el pabellón de las islas en las pruebas de natación. A pesar de intentarlo y de ser una excelente competidora, no tenía sus mejores actuaciones, siendo 24ª con 2.12,86 en los 200 espalda, aunque con sus cronos las semifinales y la final estaban a su alcance. En esto Juegos, la selección nacional de natación se vio sacudida por la polémica, como la misma nadadora declaró ante el diario El Mundo Deportivo en el siguiente artículo. Una pena que la carrera deportiva de Escarlata no tuviera continuidad. Si bien siguió nadando y demostrando su enorme talento en las más diversas pruebas, pocas veces más lo hizo al nivel que la llevó a ser a nuestro entender, la mejor nadadora de nuestra historia, dados sus éxitos internacionales a pesar de no haber sido la que más récords haya batido.

Concluimos así nuestro repaso, confiando en que próximamente podamos añadir más nombres a este artículo. Vistas las evoluciones en las islas orientales, es probable que pronto podamos hablar de un olímpico majorero o conejero en nuestra natación. Tokio 2020 nos espera, y hasta ese entonces pueden pasar muchas cosas.

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